Una deliciosa novela que se lee de un tirón. Divertida y, en ocasiones, mordaz, tiene un argumento sencillo pero bien argumentado.
La reina contra todos, podríamos decir. A nadie le interesa la lectura, excepto a ella. Se convierte en una lectora absolutamente entregada, que lee, anota y reflexiona, que descubre un mundo y no deja de profundizar en él. Y no sólo habla de libros, también de política, monarquía... Sin mucha profundidad, pero con humor ácido, va desgranando algunas reflexiones que van más allá de una divertida comedia.
Una novela apta para todos los públicos, la primera que leo de Alan Bennett, así que a por las siguientes.
Lo mejor, el final.
La reina contra todos, podríamos decir. A nadie le interesa la lectura, excepto a ella. Se convierte en una lectora absolutamente entregada, que lee, anota y reflexiona, que descubre un mundo y no deja de profundizar en él. Y no sólo habla de libros, también de política, monarquía... Sin mucha profundidad, pero con humor ácido, va desgranando algunas reflexiones que van más allá de una divertida comedia.
Una novela apta para todos los públicos, la primera que leo de Alan Bennett, así que a por las siguientes.
Lo mejor, el final.
1 comentario:
Encontré tu blog por casualidad, y me ha encantado. Debo decir que este libro me interesó y fui a comprarlo a la librería y disfruté mucho su lectura. Como dices, es de humor ácido, pero me ha encantado como retrata cómo se va enamorando una persona poco a poco de la lectura; me divertí mucho con él.
¡¡¡Gracias!!!
Ale
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