Elegía para un americano / Siri Hustvedt

Magnífica novela de Siri Hustvedt, mujer de Paul Auster, (lo digo al principio para que abandonemos ya el cotilleo en la segunda línea) y de una exquisita sensibilidad a la hora de escribir historias.

Las cartas del padre muerto dan pie a un psicoanalista y a su hermana, esposa de un novelista de éxito recientemente muerto, a indagar en las vidas de sus padres. La llegada de una inquilina a la casa del protagonista, con una niña de cinco años sirve para conocer mejor al protagonista, al mismo tiempo que presenta un mosaico de New York actual, multirracial y multicultural.

Erik e Inga reconstruyen la historia de la familia de emigrantes noruegos y se enfrentan al mismo tiempo a sus sueños, obsesiones, secretos y miedos. Según cuenta ella misma, las memorias de su padre sirvieron de base para el libro. Su interés por el psicoanálisis viene de joven y sus innumerables sueños, a los que intenta dar alguna explicación, la persiguen tanto en la vida real como en la ficción a sus personajes.

En la novela son importantes muchos aspectos, además de la historia del padre y su secreto, los personajes son muy complejos, llenos de un mundo interior inquietante y que son capaces de desvelar sus más profundos sentimientos en público.

También la novela es una continua reflexión sobre la escritura, tanto del padre en sus memorias, como del escritor muerto y esposo de su hermana. Los personajes cuentan su vida y confiesan, además de callar lo que callan, en un juego sutil de revelaciones y ocultaciones muy interesante. El concepto de narración en “construcción” me parece muy sugerente. Igual que la historia del pad

re en sus memorias, una historia de la que van descubriendo a través de lo que no cuenta el padre y han de investigar ellos. Igual les pasa a los pacientes del psiquiatra, van a desahogarse, a contar, pero “callan” mucho más. Es trabajo del terapeuta descubrir a partir de lo que cuentas, todo lo que callan. Y, de la misma manera, la reportera busca asuntos sucios en la vida pasada del escritor, marido de Inga. Quizá sea ése el tema del libro. Aunque hay otros también importantes.

Disfruté mientras la leía, disfruté de la historia y del placer de leerla.